MI querido Marce...

Oh Marce, leí uno de tus últimos posteos, y me pareció nefasto.
¿Pero viste? Uno nunca le hace caso a esa voz que le resuena en la mente, y al final te termina pasando como a mí con la pelotuda de Debora, o como con Paola, o sin con Lourdes y su séquito de pelotudas. Se hacen las buenas pero no pueden contener mucho su genio y muestran su verdadera forma, la de arpías estúpidas , soberbias, huecas y cretinas.
¿Y sabés qué es lo peor? Que al final, esa voz, siempre te termina diciendo: ¨¿Viste? Te lo dije...¨
La verdad, que por más que me esfuerze, me cuesta trabajo entender a muchas mujeres que en realidad no son más que pendejas. Son necias y tontas, buscan lo que quieren, lo encuentran y lo desechan, y luego andan llorando porque no obtiene nunca lo que desean (Aunque ya lo hayan encontrado varias veces) o de que sos forro y mal amigo, pero no es así...
Yo no sé que más hacer, realmente no puedo entender, las tratás con respeto, cariño y amabilidad y te pagan con desprecio y dolor. Ocultan sus verdaderos sentimientos, estocan, hieren, y luego quieren aparentar que no pasó nada. 
Pero yo te digo, que la herida de una daga duele más si la empuña quién amas.
¿Y después sabés lo que pasa? Terminás siendo el idiota, porque no la trataste como aquella imagen impuesta por la sociedad, de ser sólo un pedazo de carne con orificios sin más utilidad que la lujuria.
Y te digo amigo mío, que son tontas y caprichosas esas cretinas, que cuando ya no les queda nada vienen a por vos de nuevo para joderte la existencia.
Y cuando abrís tu corazón y revelás tus buenos sentimientos, te los magullan y mancillan sin piedad ni respeto alguno. ¿Y todo por qué? Porque sos descartable, la sociedad lo impuso así, y tus sentimientos y valores ya no importan, y no le van a importar a nadie, porque esta sociedad es MIERDA, no es más que ello, ni lo va a ser jamás. ¿Te acordás de cuando Debora me cambió, literalmente por los estúpidos pajeros de ese oliche de mierda alque iba? ¿Y todo por qué? Porque soy descartable...
Fijate como son las cosas ahora, que el forro de Campbell que se re ortivó conmigo y con Paola, viene después como si nada, con su autito, y entonces Paola se olvida de golpe de lo mal que la hizo sentir y se va de joda, mientra yo, que como un idiota me quedé con ella me termino quedando solo.
¿No te acordás también de cómo te basureaba con las amigas? Ahí tenés una idea de lo forra que es la gente.

Al final, no fuí a la celebración de Pascuas con Laura, por quedarme intentando buscar una forma de arreglarle la cagada que generé en su máquina. ¿Y sabés qué? Me sentí como el orto al no haber poder ido (Y además poque me sentí religiosamente mal por no haber asistido, todo por atormentarme tratando de arreglar algunas d emis cagadas), ¿Y a alguien le importo? Para nada. Y ahí tenés mi ejemplo, yo como un pelotudo me preocupo por el otro, mientras el otro ni se acuerda de mi existencia, y lo digo, porque todavía ni sé porque nos llamamos amigos, si entre Laura y yo sólo hay una farsa de palabras que son llevadas por el viento.
A mí realmente me cae bien ella, pero somos de dos mundos diferentes, incompatibles, y sea cual sea mi esfuerzo, el resultado siempre será el mismo fracaso. Yo me rendí, bajé los brazos. Estoy harto de todo.
Pero, finalmente, lo peor de ello es que te cerrás, y privas de tus valores a gente que realmente vale la pena (Sino mirá a Mariana P y a Sonia)

No sé que más decirte, más que te comprendo y te aguanto.

Saludos.