Bienvenido a la lorica.
El objetivo principal de este blog, es tratar algún que otro tema de religión, medio ambiente, y en especial, despejar algún que otro mito acerca de las armas y armaduras antiguas, medievales y renacentistas.
Un saludo.


miércoles, 2 de abril de 2008

Acá les dejo algunos dibujos, que le hicieron algunos dibujantes (Valga la redundancia) como homenaje.



















Me acabo de olvidar de postear.... Que idiota.
Hoy también es 3º Aniversario de la desaparición física del Papa Juan Pablo II, un gran Papa que hizo mucho por mejorar la humanidad (Y aquél que sea detractor, al menos no puede negar que hizo mucho más que sus antecesores)
Lo recordamos con el corazón lleno de orgullo por este verdadero hombre de Dios.

Acá hay algunas repercuciones de su Papado, extraído de Wikipedia.
¨En los últimos días de su vida y tras su muerte, son muchos los logros de este Papa que se han destacado. Respecto de la política mundial, poco antes de su muerte, la BBC comentó, refiriendo una significativa toma de postura de Mijail Gorbachov: "El Papa -le dijo Gorbachov entonces a su esposa Raisa- es la autoridad moral más importante del mundo y es eslavo". El entendimiento entre ambas personalidades sin duda facilitó el camino hacia la democracia en el bloque oriental".26 En palabras del General Wojciech Jaruzelski, último mandatario en la Polonia comunista, la visita de Juan Pablo II a Polonia en 1979, fue el "detonador" de los cambios.27 Con ocasión de su fallecimiento, el Presidente del Parlamento Europeo, el socialista Josep Borrell, escribía: "Me inclino con respeto ante la memoria de esa gran personalidad que ha marcado de forma determinante la historia del último cuarto de siglo. (...) Imponía el respeto por la claridad de sus opiniones y por la sinceridad de sus continuos esfuerzos en favor de la justicia, la paz y el respeto de la dignidad y de los derechos humanos. Nadie olvidará sus gestos de apertura y diálogo dirigidos a los representantes de las demás religiones, particularmente durante los encuentros de Asís. La historia recordará el determinante empeño de Juan Pablo II en la reconducción de los Estados de Europa Central y Oriental hacia la democracia y la libertad. Recordará, asimismo, su actividad, a menudo discreta pero decidida, en favor del diálogo entre los pueblos y los Estados en conflicto y por la reanudación de las negociaciones entre los Estados de Oriente Próximo".28 El Canciller alemán, Gerhard Schröder, declaraba que el Papa había «influido en la integración pacífica de Europa de muchas formas. Por sus esfuerzos y por su impresionante personalidad, ha cambiado nuestro mundo».29

Se destaca también su empeño en pro de los derechos humanos: "Su empeño como Pontífice fue no sólo el difundir el Evangelio, sino el transformar el Papado romano en el portavoz de los derechos humanos" - indica un artículo de la CNN citando a Marco Politi, autor del libro "His Holiness".30

El balance de su vida, desde un punto de vista religioso y personal, lo trazó el entonces Cardenal Ratzinger -luego Benedicto XVI- en el funeral por Juan Pablo II: "«Sígueme», dice el Señor resucitado a Pedro, como su última palabra a este discípulo elegido para apacentar a sus ovejas. «Sígueme», esta palabra lapidaria de Cristo puede considerarse la llave para comprender el mensaje que viene de la vida de nuestro llorado y amado Papa Juan Pablo II".31¨

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http://es.catholic.net/religiosas/648/1890/articulo.php?id=17790

I. Diez logros del pontificado de Juan Pablo II que perdurarán en el tiempo

1. Devolver al papado el significado de testigo del Evangelio y de la moral

Juan Pablo II nos ha hecho regresar a las raíces evangélicas de la Iglesia en la persona de Pedro. Pedro, en el Evangelio, no se presenta como un empresario que vende una nueva espiritualidad al mundo; ante todo es un testigo: en la resurrección, como predicador y después como mártir.

El Papa mismo ha tomado muy en serio la instrucción dada por Cristo a Pedro durante Última Cena, fortaleciendo a sus hermanos, y nos ha transmitido la fe del Evangelio a través de su misma persona y usando todos los medios de comunicación.

2. La renovación del papado según el espíritu del Concilio Vaticano II

Juan Pablo II ha comenzado esta renovación según el espíritu de Vaticano II. Ve en el Concilio la mano providente de Dios que impulsa a la Iglesia hasta el tercer milenio, un milenio de evangelización desde el Evangelio.

Para el Papa, en los números 22 y 24 de la Constitución Pastoral Gaudium et Spes se resume el Concilio y la doctrina de su pontificado: sólo en Cristo encontramos el sentido de nuestra vida y de la humanidad, y el rostro de Dios Padre (n. 22); el sentido de la vida humana no se halla en la afirmación de sí mismo, sino en el don de sí (n. 24). Estas ideas contradicen las presentadas por la cultura actual y cambiarán radicalmente la manera de concebir hoy al hombre.

3. El derrumbe de comunismo y una nueva manera de ver la historia

El Papa favoreció el derrumbamiento del comunismo, no tanto por las relaciones diplomáticas, sino por su testimonio de pastor cristiano que afirmaba y afirma con fuerza la verdad.

Juan Pablo II trabajó y trabaja convencido de que la conciencia, una vez formada, se convierte en la fuerza más poderosa, capaz de transformar la historia. Esta conciencia se halla recogida en la cultura: en las tradiciones, maneras de ser, idioma y, sobre todo, en el culto o en los compromisos religiosos.

4. Una visión del mundo desde el concepto de libertad anclado en la verdad

Después de 1989, cuando cayeron los regímenes comunistas, el Papa se dio cuenta de que un cambio político no era suficiente: se necesitaba la libertad.

Lo importante en la sociedad no son sus mecanismos. Lo que importa realmente es formar la sociedad fundándola sobre elementos mucho más personales: las virtudes, los derechos reales, el auténtico desarrollo humano... que se fundamentan a su vez sobre la libertad verdadera. Desde la encíclica Centessimus Annus y durante la década de los 90, especialmente en 1995 con la publicación de la encíclica Evangelium Vitae, el Papa ha mostrado que la libertad se fundamenta sobre el reconocimiento de la dignidad de la persona humana, un vaso lleno de derechos dados por Dios. Por lo tanto, no se puede convertir en un «derecho» (un bien) lo que por naturaleza es un mal.

La libertad verdadera significa libertad en la verdad: hay que hacer las cosas justas por las razones justas de la manera justa, no sólo «a mi manera». La Iglesia Católica tiene que transmitir este concepto al mundo.

5. El ecumenismo y la búsqueda de unidad en el corazón de la Iglesia

En la encíclica Ut Unum Sint (1995) el Papa manifiesta la postura de la Iglesia: tenemos que esforzarnos por encontrar la unidad en la verdad porque Cristo nos lo ha legado. Esto exige no considerar el ecumenismo como un negocio en el que alguien gana y alguien pierde. Implica un crecimiento mutuo en la verdad, en la búsqueda del mensaje de Cristo y de la identidad propia de la Iglesia.

El Papa es el único líder religioso que sigue creyendo en la posibilidad del diálogo desde y para la caridad cristiana.

6. El incremento del diálogo entre judíos y cristianos

Actualmente, el diálogo religioso y teológico entre los judíos y los católicos ha alcanzado una profundidad e importancia no vistas desde el 70 d.C., gracias al trabajo realizado por el Papa siguiendo el Concilio Vaticano II.

Él posee un gran ascendiente en el mundo por ser un testigo real de la libertad encontrada en la ley moral natural escrita en los Mandamientos.

7. El incremento de diálogo entre las religiones del mundo

El diálogo logrado se funda en la verdad, porque el Papa cree que todas las verdades conducen a la auténtica Verdad; es decir, a Dios, a Jesucristo.

Este diálogo inicia con la pregunta que dirige el Papa: «¿Cuál es la verdad que define tu vida?». En la respuesta, encontramos la convicción religiosa que da forma a una vida.

Este diálogo implica también el mundo de la ciencia, en el que el Papa ha entrado como en otro lugar de diálogo «interreligioso».

8. La teología del cuerpo

La revolución sexual quiso eliminar de nuestra conciencia el pensamiento moral de quiénes somos como seres corporales, presentando la masculinidad y la feminidad como meros accidentales y no manifestación del plan de Dios. Mucho antes, la misma dignidad de la persona humana había sido atacada por otras corrientes de pensamiento.

Así, la teología del cuerpo es una contribución enorme al entendimiento humano. Implica una reconstrucción de la persona en su dignidad, de la familia en su realidad, del matrimonio y del celibato, como dimensiones íntegras de la misma dimensión de la persona.

9. El Catecismo de la Iglesia Católica, una definición de la fe de 2000 años y una plataforma para la fe de muchos años más

El Catecismo de la Iglesia Católica es una plataforma para la verdad en un mundo que cree en la existencia de «muchas verdades», desde la cual la Iglesia afirma con claridad, con totalidad, con fuerza convincente y con coherencia, lo que es la fe.

Poseer este testimonio de nuestra fe es verdaderamente una gracia del Espíritu Santo. No existe actualmente ninguna otra comunidad que lo tenga.

10. Las personas, comprometidas a anunciar el Evangelio sin temores

El Papa recibió la inspiración personal a «no tener miedo» y ha formado también a miles y millones de personas con este mismo espíritu.

Podemos describir el siglo XX como un siglo de miedo y podríamos pensar que esas palabras de Juan Pablo II son puro romanticismo; mas su vida es testimonio de lo que significa vivir más allá del temor. No es que viva sin miedo, sino desde la configuración de su vida con la del Cristo Crucificado; desde el encuentro con Aquel que ha tomado el peso del temor del mundo y lo ha ofrecido como sacrificio a Dios Padre en un acto perfecto de amor.

II. La tarea que Juan Pablo II nos ha dejado

1. Diálogo con las iglesias ortodoxas

Las comunidades eclesiales ortodoxas no estaban dispuestas al diálogo. Esperemos que en este siglo las condiciones cambien.

2. Diálogo con China y entrada en ese país como campo de misión

El Papa escribió al Presidente Deng Xiaoping en 1983 para invitarle a un nuevo diálogo, pero el Presidente todavía no ha contestado la carta.

China trata de mantener los controles políticos, sociales e ideológicos propios del estado comunista, a la vez que juega con la tecnología y el mercado del siglo XXI. Esto no puede mantenerse mucho tiempo. Cuando caiga el comunismo, aparecerá el más grande territorio de misión desde la apertura de Europa del Este, porque el comunismo habrá dejado una carencia total de filosofía y religión. Y la misión en China será más fecunda que la de la India, donde reinan tradiciones anticristianas.

3. Renovación de la liturgia según el verdadero espíritu del Concilio Vaticano II

Parece que poco a poco vamos pasando de un estilo «Pizza Hut» a un estilo católico con «registro sacro». Esto se manifiesta en las iniciativas surgidas entre los laicos y los consagrados para renovar el sentido católico de lo sagrado en la liturgia.

Este paso es importante porque como rezamos así creemos.

4. Nuevas maneras de pensar en el mundo político basadas en la doctrina social de la Iglesia

Parece que el mundo mira con desesperanza los sistemas políticos actuales, pero tampoco plantea nuevas opciones. Y nunca ha tomado en cuenta la doctrina social de la Iglesia.

Busca una solución que funcione globalmente, basándose en uno de los dos modelos: utilitarismo, como en Estados Unidos, o pietismo, como en el Islam radical. La tercera opción, la verdadera opción y solución, es la que presenta la doctrina social de la Iglesia.

5. Renovación de la vida religiosa y consagrada

Hasta ahora, para muchos la reacción ante los problemas de la vida religiosa y consagrada es: «Si está muriendo, déjala morir; y si está creciendo, ayúdala».

La vida religiosa y consagrada ha crecido de maneras muy distintas buscando la renovación de la Iglesia. En el futuro, hay que ver cómo combinar estas fuerzas en la vida institucional.

6. La crisis de fe en Europa y la nueva evangelización

La exhortación apostólica Ecclesia in Europa inicia con el texto del Apocalipsis de san Juan a las siete iglesias. Esas comunidades no existen hoy, pero fueron los cimientos de la fe cristiana. En la visión de Juan, Cristo exhortaba a cada una para que incrementara su fe, esforzándose por vivir el tesoro recibido.

De manera semejante, el Papa escribe ahora a la Iglesia en Europa, esa iglesia que ha mantenido fuerte la fe durante 1500 años, como si le dijera: reconoce que aunque has sido cimiento para la fe cristiana durante mucho tiempo, no estás segura; incrementa tu fe y esfuérzate por vivirla hoy.

Para superar la crisis de fe por la que está pasando Europa, hay que revitalizarla desde la cultura, que este continente regrese a sus raíces cristianas.



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